sábado, 11 de diciembre de 2010

Kuala Lumpur último día y el gran problema del peso de las valijas

Nos despertamos lo antes que pudimos porque estábamos reventados. Sin desayuno nos fuimos a buscar un lugar para desayunar… obviamente no encontramos… jajaja!!! Compramos unas galletas en un super y nos tomamos un café en un carrito de la calle, pero estaba buenísimo, era como Starbucks.

Después nos metimos en el “Central Market” un edificio de 1888 que tiene un mercado de artesanías y todas esas cosas. Los precios son bastantes salados y bastante fijos. No se puede regatear mucho. Estuvimos hasta el mediodía. Luego de nuevo para Petaling Street. Ahí estuvimos como hasta las 16 porque Nat se moría de hambre y como la señorita quería comer comida occidental fuimos a McDonalds. Obvio que no queria. Pero me decía “te comes una McNuggets”. Accedí. Para queee!!! Para que después este todo el día con dolor de estomago. Hasta que me subí al avión y me dormí seguía con dolores!!! Increible! Yo no se que tiene pero a los dos nos cayó mal. Debe ser el Aceite quizás, no sé.

A las 18 teníamos que hacer el check out del hotel así que nos bañamos, acomodamos las mochilas y partimos. A donde? De nuevo a Petaling a hacer algunas compritas mas. En realidad mucho no compramos. Lo que pasa es que se pierde mucho tiempo regateando. Porque ellos te lo pueden bajar. Pero prefieren perder la venta si no te lo venden caro. No es como en India que se desesperan. Te dejan ir. Es como que le tenes que andar rogando que te lo baje y si le caes bien quizás accede y te baja el precio. Además, te tiran cualquier cosa, precios irrisorios. Pero viven de esto, del turismo, principalmente Europeo y Japonés, no Sudaca! Jajaja! Para ellos es re barato!

Llego el taxi al hotel y nosotros ya lo estábamos esperando. A eso de las 21hs. Lo contratamos directamente desde el hotel por 90rm. No quisimos ir en el tren o en el shutle bus del aeropuerto por los bolsos. Y menos mal. Porque hubiese sido imposible. La valija grande pesaba 800 kilos!!!

Llegamos al airport, hicimos el check in, nos pasamos de peso con la valija grande, pesaba 35 y debía pesar máximo 32. Por suerte nos dejo pasar el pibe. Muy macanudo. Y bueno, así nos empezamos a despedir del viaje, que la verdad se nos pasó volando.